23 marzo, 2013  by

Asalto isleño

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El Real Madrid, invicto en casa en competición doméstica desde la final de la pasada campaña, recibía el domingo en el Palacio de los Deportes a un C.B Canarias afectado por el clásico mal de los equipos de las islas: escuadras sólidas en casa que bajan el nivel como visitantes. El debut de Tremmell Draden añadía pimienta al interesante duelo.

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Asalto isleño

Juan Luis Barbero

19.marzo.2012

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Saúl ataca el aro merengue. Fuente de foto: acb.com


Y los corsarios isleños demostraron desde el primer cuarto que su incursión en la Península no iba a ser ninguna broma. Richotti con ganas de mostrarse bajo las luces madrileñas, en una temporada menos brillante de lo esperado para él, y el eterno Guillén mostrando su inagotable calidad: dúo dinámico para armar el taco ante un Madrid atolondrado. Tan sólo la aparición desde el banquillo del capitán Reyes mitigó el mal arranque de los locales, que acabarían el primer parcial 19-26 abajo, incapaces de detener el torrente ofensivo generado por el escolta y el pívot de 36 primaveras. Sorprendente la pasividad de un reputado defensor como Slaughter a la hora de incomodar el infalible lanzamiento desde 5-6 metros de Richi… ¿desidia individual?, ¿scouting liviano?.


La salida del combo canario reduciría y mucho la fluidez ofensiva de los de Alejandro Martínez en el segundo acto, con los merengues limando la desventaja gracias a un quinteto en el que llegarían a coincidir el Chacho, Llull, Carroll y Mirotic. Ofensiva total que no intimidaría a un Canarias respondón gracias al trabajo y dinamismo de Donaldson. Los primeros minutos de Darden con la casaca blanca dejarían un buen trabajo en el rebote ofensivo, mientras la vuelta a pista de Richotti y Guillén volvería a lanzar a los amarillos, con ambos encontrándose en ataque. 45-40 al descanso, ligera ventaja para los de Laso gracias a un monumental Felipón, amenaza interior y exterior.

Un tercer cuarto de transición, con Slaughter y Llull imponiendo su físico en las distintas áreas y los Canarios aguantando el envite merced a una extraordinaria circulación de balón, nos llevaría a los 10 minutos decisivos con un 65-62 en el luminoso. y ahí llegaría el abordaje final de los corsarios.

Un Real Madrid incomprensiblemente cándido a la hora de cerrar su aro permitió la sangría de rebotes ofensivos visitantes, y la frustración general acabó alcanzando al coach Pablo Laso, expulsado por protestar airadamente una supuesta falta sobre un Mirotic fuera del partido toda la tarde. La carga final de Carroll y de un Chacho muy agresivo en las penetraciones a canasta (bajo el manto de un Palacio inflamado) no serviría de mucho a los blancos, ante el acierto de Blanco, Rost (18 puntos para el americano) y la genial dirección de un Uriz apoteósico en los minutos decisivos. A cada triple del cañonero mormón (19 puntos finales) respondía el base nacido en Pamplona, con regalos por doquier para sus compañeros (7 asistencias). 

83-96 final. Enorme victoria del C.B Canarias, que da mucha tranquilidad a la tropa. El Madrid acumula su segunda derrota consecutiva en casa (tras la de Euroliga ante Unicaja), y ecos de duda comienzan a resonar en el planeta merengue.

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