Descanso activo

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Algunas veces la normalidad es una bendición. Algo así debieron pensar los jugadores de la selección este miércoles. España tumbó al Líbano con la seguridad de los grandes (57-91) en un partido muy igualado en su primer acto, pero que pronto se definió a favor de los españoles gracias al talento de Marc Gasol, que ofreció su mejor versión para convertirse en el Rey Midas de la pintura: todo lo que tocaba, lo anotaba (25 puntos y 8 rebotes). El partido fue el día de los pivots españoles, que sumaron el grueso de los puntos: 55 de los 91 que consiguió el grupo de Scariolo. Gran partido de Vázquez (15 puntos y 7 rebotes) y fantástico despegue de Rudy, que tras jugar 13 minutos (en los que sumó 7 puntos y 7 rebotes) se tuvo que retirar como consecuencia de un golpe en la cabeza. Por lo demás, España tomó aire y empleó el envite para dar minutos a Ricky y Lllul, una pareja de jugones en horas de tribulación que pueden ser claves cuando lleguen los cruces.

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Descanso activo

Pedro Fernaud

2.septiembre.2010

 

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La buena conexión entre los jugadores españoles, dirigidos con buena mano por Ricky y Raúl, 

fue clave en la correcta ejecución de los contraataques, factor clave de la victoria española.

Fuente de foto: acb.com.

 

El Líbano es una hermosa tierra; un país con cultura mestiza y un pasado lleno de historias. Emerge en Oriente Medio y desgraciadamente suele sufrir a menudo las tensiones entre israelíes y palestinos. Pero también es un lugar para fascinarse y beberse su sol antiguo, que data de cuando los fenicios tenían allí su hogar madre. En baloncesto, son un equipo aguerrido, bien organizado, que lo fía todo a los raptos de talento de algunos de sus jugadores.


El que quizá más destreza tenga para practicar el baloncesto no ha nacido en el país. Se trata de Jackson Vroman, un ala pívot estadounidense que el año pasado se nacionalizó libanés. Vroman, que en su momento hizo un buen papel en Girona y Gran Canaria, fue un dolor de muelas para la defensa española en el primer cuarto. Sólo en ese periodo anotó 12 puntos y capturó 6 rebotes. Por suerte, su proyección se quebró por las faltas personales. Pero su versatilidad y dinamismo puso en evidencia a la defensa española.


Enfrente, España mantuvo el tipo gracias, en primer término, a la efervescencia de Rudy, autor de siete puntos y siete rebotes en 13 minutos. Lástima que el escolta balear sufriera un trompazo en la cabeza y no pudiera seguir reconciliándose con la excelencia. En esa primera fase, también estuvieron entonados Navarro, ‘Garbo’ y Marc por lo que la vía de agua abierta por Vroman y los tiradores libaneses no fue a más.


El segundo cuarto supuso el punto de inflexión del encuentro. ¿Qué paso? Pues que un gigante llamado Marc Gasol estiró los brazos y ofreció un tratado abreviado de fintas y reversos ganadores en el poste bajo. Por algún atávico motivo, la cámara de televisión empezó a mostrar más interés por dos atractivas libanesas que jaleaban a los suyos en las gradas que al juego. Sinónimo de que las cosas iban bien para España.


España estiró el marcador a su favor (32-43) gracias a la efervescencia de su defensa. La pega fue que no tenía el día en cuanto al lanzamiento exterior (3 de 18 en triples al descanso). Sin embargo, el tercer acto acabó por definir la suerte del encuentro. Marc Gasol se animó a explorar todas las posibilidades del bloqueo y continuación y la puerta atrás y JC Navarro y, sobre todo Ricky, se pusieron las botas a la hora de surtirle de balones. Resultado: 25 puntos y 8 rebotes para el center de Sant Boi, claro MVP del encuentro.

 

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Fran Vázquez fue el otro vértice del juego interior de la selección cuando Marc se tomó descanso.

Gran partido del pívot de Chantada. Fuente de foto: Rafael Casal, marca.com.


El resto del encuentro fue a beneficio de inventario. Un descanso activo que vino muy bien al grupo de Scariolo, como inyección de autoestima y también para recuperar los buenos hábitos competitivos, como una pluscuamperfecta puesta en escena de los contraataques.


Así las cosas, Fran Vázquez hizo un encuentro de manual y Felipe, Claver, Mumbrú y Lllull dejaron destellos de su clase. Próxima estación: Canadá (que palmó con el Líbano pero que se quedó a tres puntos (perdió por dos) de ganar a la imbatida Lituania), mañana a las 15 de la tarde, televisado por la Sexta.

 

Los mejores nuestros:

PTS 13_Marc 11_Vazquez 14_Mumbru
25 15 9
REB 9_Reyes 11_Vazquez 13_Marc
9 8 8
AST 6_Ricky 7_Navarro 8_Raul
7 4 4

* Más jugadores empatados con ese valor.

 


Análisis del juego, en 4 pinceladas

 


Marc Gasol, la piedra filosofal de la selección. Cada equipo tiene su alquimia. La de España en este campeonato se llama JC Navarro y Marc Gasol. Si ambos exhiben su mejor nivel de manera coordinada, todo será posible para esta desconcertada selección. Frente a los libaneses, Marc demostró sus infinitos recursos para jugar cerca del aro y rebotear como si lo fueran a prohibir. Al fin parece que sus compañeros han interiorizado algo tan evidente como que él debe ser el faro ofensivo del equipo, la primera referencia. Básicamente porque si le hacen llegar balones, será bastante fácil que él los convierta en canastas o saque falta personal (faceta que, a la hora de rentabilizarla, sigue teniendo que mejorar; 5 de 9 en tiros libres ayer).


Buena circulación de balón, mala selección de jugadas. España es ejemplar si hablamos de la circulación de la pelota. Los jugadores mueven el balón con la justa mezcla de criterio y velocidad. Pero este miércoles se obcecaron en anotar de triple (6 de 26). Ya que no tenían el día desde la larga distancia, y dada la falta de centímetros de los libaneses, deberían haber probado más las penetraciones a canasta.


Recuperación de los buenos hábitos en cancha abierta. Por esta vez, España se pareció a sí misma y ejecutó en cuanto pudo los contraataques. Lo hizo con una perfecta afinación de pase, velocidad, orden, plasticidad y contundencia. Vázquez, Reyes, Ricky y Lllul fueron los más destacados en ese apartado.


Un equipo generoso, eficaz y por fin más reboteador. España ganó claramente la partida a los libaneses en el capítulo de las asistencias (29 contra 5) y en el de los rebotes (46-28), donde por fin los nuestros se redimieron gracias a una mayor actividad, convencimiento y orden. Mar Gasol fue también el mariscal en ese apartado, yéndose hasta las 8 capturas (5 de ellas ofensivas).

 


Los 5 premios fiebre de este partido

 


Premio «Esencia de jugón», al mejor jugador del encuentro. Para Marc Gasol, nos sobran los motivos: 25 puntos, 8 rebotes, 1 tapón y 1 asistencia.

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Premio Show Time. A la jugada más espectacular del partido, con Magic en la memoria. A la conexión entre Ricky Rubio (pase picado sin mirar) y Víctor Claver, que culminó la acción con una canasta a aro pasado, rectificado en el aire incluido.

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Premio «Mejor no lo pienses». Al jugador más duro. Para Jackson Vroman. El ala pívot libanés estaba tan enchufado en ataque que se olvidó de poner el modo cauteloso en defensa, factor que Marc aprovechó para desplumarle a faltas con la velocidad de sus movimientos.


Premio «No en mi cara». Al mejor tapón del partido. Fran Vázquez fue fiel a sí mismo y tapó el cielo a un jugador libanés en una acción plena de coordinación y plasticidad.

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Premio Toni Kukoc. «Una canasta hace feliz a una persona. Un asistencia hace feliz a dos», al mejor pasador. A Ricky Rubio, por sus siete creativas asistencias.

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