Lenta agonía pucelana

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Nadó y nadó contra corriente el Blancos de Rueda durante toda la liga y al final…llegó a la orilla de la salvación. De nuevo se reencontró con su juego de equipo, en el que todos aportan, y logró imponerse a un Cajasol algo blando en defensa. Nacho Martín por n-
ésima vez (20 ptos, 10 reb) y Montáñez fueron los mejores por los locales. En el Cajasol destacaron Bogdanovic en su lucha con Nacho Martín y en la dirección Satoransky, aunque no fueron suficientes para doblegar al Blancos de Rueda.

Partido sonrojante de los locales ante un CAI muy superior. Con un gran acierto desde la línea de tres y clara superioridad bajo el aro, apenas se vieron inquietados en el marcador durante todo el partido. Rudez con 25 ptos el mejor de los visitantes y Omari Johnson con 17 el mejor por los locales. [Estadísticas]

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Lenta agonía pucelana

Jorge Álvarez

Fotos: Marcos Sánchez González

15.mayo.2014

Lucha desigual bajo los aros, los pivots (grandes) de CAI, no daban opciones a los de Valladolid, ni en ataque, ni en defensa (Norel, Haritopoulos). Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González

 

El pabellón Pisuerga presentó de nuevo un aspecto desangelado. Tan sólo el bullicio de los niños de los colegios que la directiva había invitado ponían un poco de calor al encuentro. Y es que los últimos partidos del CBValladolid son pura agonía. Sólo los aficionados irreductibles siguen acudiendo al Pisuerga cada fin de semana con la idea de disfrutar de los últimos partidos ACB de su equipo. Y eso es lo que realmente esperan los aficionados, que sean los últimos partidos en ACB del CB Valladolid, como un mal menor que implique una refundación del proyecto buscando fuentes de financiación y apuesta por la cantera. Por ello no se entienden los rumores que apuntan a maniobras en los despachos para intentar evitar el descenso, poniendo trabas a los candidatos a subir. ¿Quién quiere otra temporada como la actual?

 

En cuanto al partido, desde el salto inicial se vio qué equipo se jugaba algo y qué equipo no. Con un parcial de inicio de 0-13 en 2′, gracias a 4 triples consecutivos, el CAI presentaba armas y superaba con facilidad la frágil defensa local. Ni tras tiempo muerto de Casas para llamar al orden y a la intensidad a los jugadores se taponó la herida abierta desde la línea de tres. El equipo visitante finalizó el primer cuarto dominando por 17-28 con 6-10 en triples. A destacar el croata Rudez con 4/5 y Roll con 2/4.

 

 Gran jugador este Rudez, fuerte, técnico y gran tirador. Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González

  

En el segundo cuarto, por fin el CB Valladolid llegó al partido y comenzó a defender. El cambio a zona y el aumento de la intensidad propiciaron los primeros fallos de los tiradores del CAI, cebados ante la facilidad para anotar del primer cuarto. El equipo local se situó a 4 puntos y Abós se vio obligado a pedir tiempo. Tras la charla, el balón volvió a fluir en ataque hasta hacerlo llegar a donde más daño le hace al equipo local, bajo el aro. Llompart tomó de nuevo el timón y los alocados tiros de tres pasaron a ser pases extra a Norel, quien se mostró muy superior a los pivots locales. Centrado de nuevo el equipo visitante, la diferencia volvió a aumentar y el partido ya discurrió sin sobresaltos hacia una plácida victoria del CAI. Al descanso, 30-45.

 

El timonel de este equipo «Llompart» y se nota cuando no está en pista. Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González

 

Por si cabía alguna duda, el inicio del segundo tiempo del CAI fue similar al del comienzo del partido. De nuevo acertado desde la línea de 3, esta vez Roll y Sanikidze se encargaron de asestar un parcial de 4-16 demoledor que acabó por desalentar cualquier intento de resistencia del equipo local.

 

Ante una defensa lenta o mal colocada, Roll no perdona. Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González

 

A partir de ahí, cada jugador del CBValladolid se dedicó a maquillar sus números, porque al final siempre habrá ojeadores que se fijen en esos datos de cara a la temporada que viene, sin prestar mucha atención a cuándo se hacen esos números, si cuando todavía hay algo en juego o cuando ya no importa. Si algún jugador local es especialista en ello, ese es Omari Johnson. Por el lado visitante, Abós pudo dar minutos a los menos habituales, como el caso de Tabu, quien a pesar de la placidez del partido para su equipo no se libró de un par de broncas de su entrenador.

 

Ninguno de estos dos tuvo su día (Johnson, Tabu). Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González

 

En el último cuarto, más de lo mismo. Buenos minutos de Andusic por los locales y Stefansson por los visitantes. Ninguna reacción de los locales, perdidos en un carrusel de cambios tratando de lograr algo de intensidad para no perder por una diferencia demasiado escandalosa.

 

Andüsic en todos los partidos, tiene momentos en los que se «borra» y otros en los que parece lo que realmente es, «un escolta que desearía cualquier equipo grande». Por el contrario Stefansson, es un buen jugador, que da otras cosas, como  defensa y pelea constante. Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González

 

Lo único a resaltar de ese periodo final fue el debut de Antonio Izquierdo. El canterano ha estado relegado al banquillo toda la temporada viendo como otros jugadores de su mismo nivel disfrutaban de minutos. Por fin Casas escuchó al público y jugó los últimos 3 minutos de partido siendo muy aplaudido cada vez que intentaba cualquier acción. Al final, 68-96 para el CAI, quien pudo ganar por más diferencia, si no hubiera reservado en los instantes finales a sus mejores jugadores para evitar lesiones de cara a batallas más importantes.

 

Pensabamos que a «Antonio Izquierdo» no lo íbamos a ver jugar más esta temporada y salió a falta de 2 minutos: 2 puntos y 1 asistencia. Drenovac es de lo poquito que se salva de este Valladolid y es muy joven. Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González

 

Como decía al comienzo de esta crónica, si se vieran posibilidades de lograr un patrocinador y hacer una campaña aceptable, entendería las gestiones en los despachos del CB Valladolid para intentar mantenerse de nuevo en ACB. Pero para seguir con esta agonía, la mejor solución es comenzar de cero. No se sabe a quién beneficia continuar con esta escapada hacia ninguna parte, pero si la directiva no es capaz de cortarla, debería ser la ACB la que tomara las riendas de una vez y pusiera un poco de orden en el tema de descensos y ascensos, para evitar que su imagen y la de los equipos que la conforman termine por deteriorarse por completo.

 

 

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