Un equipo con mucho corazón

El baloncesto es un deporte que, más allá de estadísticas, funciona gracias a los intangibles. Todos esos pequeños detalles que no se ven y que hacen competitivo a un equipo. Rosa Vara de Rey es nuestra especialista en intangibles. Atenta y simpática, licenciada en inteligencia emocional, nuestra redactora está habituada a seguir a los profesionales blancos. Trabaja con ellos y los conoce de cerca. Por eso no ha tenido ningún problema en desvelarnos, con encanto y sutileza, un poco más cómo está configurada la plantilla blanca y en explicarnos cuáles son las principales virtudes de un plantel que, si nos atenemos a sus observaciones, derrocha calidad humana. Un motivo más para desear lo mejor a nuestro representante ACB en la cita más importante del baloncesto continental, que se disputa este fin de semana en Barcelona.

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Un equipo con mucho corazón

Rosa Vara de Rey

5.mayo.2011

Sergio Llull es uno de los principales referentes anímicos de un equipo que espera convertir su buena química como grupo en un extra para conquistar su novena Copa de Europa. Fuente de foto: altaspulsaciones.com

 

 

Puede que el Real Madrid no tenga al entrenador más laureado de Europa en su banquillo, puede que no haya estado en las últimas ediciones de la Final Four, puede que el Real Madrid no sea el equipo que más puntos anota, que menos balones pierde o que más balones recupera… En la vida hay veces, las más bonitas y más especiales, que las estadísticas se rompen, revientan, explotan y de esa bomba sale un equipo que hace leyenda. Eso le puede pasar este año al Real Madrid.

Este equipo tiene alma, mucho corazón y muchas… Bueno, ya sabéis. Y con estos ingredientes se construye la receta perfecta de un campeón de Europa. Sabéis que no soy muy amante de los datos técnicos y tácticos así que aquí os paso un scouting del CORAZÓN de todos los miembros de este equipo:

 

BASES

 

Pablo Prigioni: es canchero, tiene rabia, en muchos momentos cansa a sus compañeros con sus broncas y sus reprimendas en la cancha, pero es absolutamente necesario para este equipo. Pablo sabe a dónde puede llegar el Madrid, Pablo cree de corazón en todos y cada uno de los miembros de este conjunto. Vino al Real Madrid para ganar la Copa de Europa y esta puede ser una de sus últimas oportunidades.

 

Sergio Rodríguez: llega en un gran momento tras una campaña muy dura para él. ‘No se le ha olvidado jugar’ nos ha dicho Carlos Suárez muchas veces durante la temporada y yo estoy segura de eso. Siempre con una sonrisa en la boca, sin un mal gesto nunca para nadie, es la amabilidad en persona. Magia pura de baloncesto que va a salir de golpe en esta Final Four.

ESCOLTAS

 

Sergio LLull: pocas cosas me quedan por decir del ‘ídolo del madridismo’ En la cancha es fuerza, raza, explosividad, velocidad, calidad… Es tantas y tantas cosas. Fuera de ella tampoco lo ha pasado bien en algunos momentos con las lesiones pero siempre se ha mantenido con la mayor ilusión y con el objetivo de llevar al Madrid a lo más alto. “Hemos comido mucha mierda” me dijo cuando el equipo se metió en la F4. Pues sí Sergio, mucha durante muchos años, pero yo sé que eres consciente de la oportunidad que tienes en tus manos.

 

Sergi Vidal: quien le iba a decir al eterno capitán del Baskonia que su vida en Madrid iba a ser tan distinta. Goza de pocos (muy pocos para mi gusto) minutos, pero es pieza básica en este vestuario. Siempre está animando a los que están en la cancha, no protesta, no se queja y tiene una educación y un talante ejemplar. Si cuenta con minutos en esta Final Four se va a dejar el alma en la pista, no tengo ninguna duda.

 

Clay Tucker: esta campaña ha asumido el rol de sustituto natural de Louis Bullock y quizá la sombra de Sweet Lou ha pesado mucho en su rendimiento en la cancha. Es un gran defensor y ya ha encadenado buenos partidos en ataque que pueden ayudar mucho al equipo. Fuera de la cancha también es ‘sweet’. Siempre se está riendo y gastando bromas y todas, absolutamente todas, las personas que conforman el Real Madrid de Baloncesto hablan bien de él.

ALEROS

 

Carlos Suárez: es el corazón. Ya era bueno, pero este año ha dado un paso de gigante en su progresión convirtiéndose en uno de los jugadores claves de este plantel. Tiene esa inocencia buena que hace que no tenga una mala palabra para nadie, ayuda a los demás siempre que puede, facilita el trabajo a todos los que estamos a su alrededor y llegará a ser el capitán del Real Madrid (con permiso de Llull). Besa el escudo porque lo siente, porque esta temporada ha cumplido su sueño de vestir de blanco.

 

Novica Velickovic: caso extraño el que lleva viviendo Nole las dos últimas campañas. Dentro tiene una calidad inmensa y por unas cosas o por otras aún no la ha sacado vestido de blanco. Esperemos que se destape el tarro de las esencias en esta F4, porque con Velickovic al 100% el Madrid es imparable. Siempre acompañado de su fiel amigo Tomic, con él es con el que más se ha desahogado en su difícil situación. Pero que nadie piense que va llorando por las esquinas, tiene un carácter risueño y es todo un espectáculo hablando español.

PIVOTS

 

Felipe Reyes: o lo que es lo mismo ‘el Monarca del Basket Español’. Felipe es el capitán de este equipo y la persona que lleva más tiempo en el Real Madrid. Él es el que se ha comido más marrones, el que lleva dando la cara varios años, el que carga en la mochila con el peso de la historia. Es el alma de este equipo y personalmente una persona que recordaré siempre con un cariño inmenso. Sueño (y sueño muy fuerte) con su imagen levantando la Copa de Europa.

 

Nikola Mirotic: Esta temporada ha demostrado que su ‘muñeca de seda’ no es flor de un día. Hacía años que un canterano del Real Madrid no llegaba al primer equipo. Vive alucinando con cada día de esta temporada que está viviendo a tope. Además, se siente español, ya es español, y le veremos triunfar con el Madrid y con la Selección.

 

Mirza Begic: es el más silencioso, el menos conocido, el nuevo. Sin comprender aún muy bien su fichaje trabaja día a día con la ilusión del que espera su oportunidad. Y mientras tanto puede ser recordado siempre en la plantilla que ganó la novena Copa de Europa para el Real Madrid.

 

D’or Fischer: tiene ese aire rapero, desgarbado, siempre con auriculares escuchando música pero cuando se viste de corto se transforma. Es capaz de convertirse en un coloso en la zona, de volar para machacar, de pegarse con los contrarios para que no le cuelen un balón. Fuera de la pista camina siempre acompañado de Tucker, sonriendo, haciendo bromas, también dialoga mucho con sus compañeros y les anima a ser mejores cada día.

 

Ante Tomic: una gacela de más de dos metros, un jugador ágil y muy habilidoso y que cuando está bien el Madrid gana muchos enteros. Sólo tiene una pega: ¡¡Nadie le ha enseñado a machacar!!  A veces llega a desesperar… Es divertido y muy amigo de sus amigos. Con Velickovic hace una pareja espectacular. Esta puede ser su gran oportunidad para dar un golpe fuerte sobre la mesa del tablero europeo.

BANQUILLO

 

En el banquillo está Lele Molin, sobre el que ya hemos hablado, pero también se encuentran otras personas cuyo corazón también ayudará a ganar la Copa de Europa: Jota Cuspinera, Tirso Lorente, Samu, Manu, Perla, Óscar, Gica y el doctor Miguel Ángel López. Prometo escribir sobre ellos si el Madrid se convierte en campeón de Europa. Y no puedo dejar de recordar a Herreros, Juan Carlos Sánchez, Luyk y Valdano, todos ellos artífices también del destino de este equipo.

Ya sólo me queda desearles mucha suerte y recordarles que este equipo tiene el CORAZÓN más grande de los cuatro que compiten en la Final Four y con eso ya tienen mucho ganado.

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