Xavi Rabaseda: bienvenidos al futuro

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Nuestro primer perfil de esta semana no va dedicado a Mirza Teletovic, MVP de la jornada (no se apuren, todo llegará). El protagonista del mismo es un joven jugador gerundense de 21 años. La estrella de los últimos años en las categorías inferiores de la selección española. La referencia ofensiva y…Defensiva. Un jugador total, con físico y mente para jugar como escolta y alero (mide 1’97, los mismo que Rudy Fernández). Un chico tímido y muy trabajador. El señor Rabaseda se ha ganado el privilegio de este retrato en virtud del partido que se marcó este domingo ante el Unicaja: 22 puntos en apenas 22 minutos, adobados con 2 rebotes, 1 asistencia y 1 robo de balón. Conoce mejor al hombre que está llamado a liderar el Regal Barcelona del segundo decenio del siglo XXI.

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Xavi Rabaseda: bienvenidos al futuro

Pedro Fernaud

18.octubre.2010

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Fuente de foto: acb.com.

 

Xavi Rabaseda (Ripoll, Girona, 1989) saben bien lo que cuesta una medalla de bronce. La joven perla blaugrana (juega con el Barça desde la categoría infantil) se ha colgado cuatro en su historia con la selección española en categorías de formación. Lo conquistó con la selección sub-16, sub 18 y sub-20. En esta última categoría lo consiguió por partida doble; la última vez el año pasado, mérito al que sumó su elección como integrante del quinteto ideal del campeonato. Escarbando un poco en you tube queda de relieve la importancia que su paleta de recursos imprimía al juego de España.

 

 

 

El año pasado guió la salvación del CB Cornellá, en la liga LEB, promediando algo más de 14 puntos por velada. Su notable rendimiento convocó la atención del director técnico del Baloncesto Fuenlabrada, Ferrán López, que persuadió al Barça para que cediera su joya de la corona a la entidad madrileña durante dos temporadas (al final de este curso, los blaugrana tienen la opción de repescarlo si lo estiman conveniente).


De momento, las actuaciones de Xavi está generando buenas vibraciones. Todavía es muy joven y muy tímido. Tiene el síndrome de ‘Don Perfecto’, habitual entre los recién llegados, que juegan con la inhibición de quien no quiere cagarla y prefieren refugiarse en un buen trabajo defensivo antes que pedir muchos balones en ataque (también es cierto que ni sus compañeros  ni su técnico lo contemplan como la primera opción…).


Frente al Bruesa dejó buenas sensaciones: 8 puntos y un rebote en 18 minutos de juego, donde demostró carácter en el emparejamiento defensivo que tuvo con el resolutivo Andy Panko. Sin embargo, en cancha del Alicante dio argumentos a los críticos de su progresión, que hablan de falta de regularidad: 0 puntos y -2 de valoración en 12 minutos de acción.


Este domingo, Rabaseda fue actor protagonista en la victoria del Fuenla sobre el Unicaja (84-77). Anotó 22 puntos, cogió 2 rebotes, dio una asistencia y recuperó un balón en 22 minutos de juego. Así hasta sumar 23 de valoración, la más alta del juego. Defendió con su habitual aplicació y en ataque empezó a desplegar la riqueza de matices de su juego. Es verdad que se benefició de las bajas en el bando contrario (Saúl y Jiménez son fantásticos defensores) y en el propio, ya que la ausencia por lesión de Cortaberría dio más vuelo a su juego.


Anotó casi todo lo que probó de tiros de 2: 4 de 5, de triples: 3 de 4 y…De tiros libres: 5 de 6. Casi perfecto. Casi estrella. Estamos ante uno de esos jugadores cuyo talento le puede llevar a saltarte varias estaciones de transición en la consolidación dentro del baloncesto profesional. Un tipo que, por norma general, prefiere machacar el aro para culminar un contraataque. Y que dice que al final no se van a notar tanto los cincuenta centímetros más lejanos en los que ha quedado fijada la línea de triple (6’75) porque “lo que se pierde en cercanía al aro se gana en espacio para armar el brazo”.


Así de analítico es Xavi Rabaseda, un chico que quiere emprender el mismo camino a la excelencia que un día iniciaron en Fuenlabrada superclases como JM Calderón, Pablo Prigioni, Walter Hermann, Marko Tomas o Saúl Blanco. Con demostraciones de concentración y valentía como las de ayer, todo será más fácil. Porque condiciones no le faltan. Suerte, Xavi, que la fiebre te acompañe…